jueves, 18 de febrero de 2010

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Hoy leyendo "mi" blog me di cuenta de que escribo para "mi". Como generalmente escribo acerca de cómo me siento, entonces, es perfecto, para repasar los diferentes estados emocionales por lo que atraviesa éste organismo. Así llevo como un record de lo que me va sucediendo. Y hay preguntas que se van contestando solas.

Por ejemplo, en el post que escribí antes de éste me cuestionaba acerca de mis expectativas y demandas emocionales de atención. Y en éstos días he ido descubriendo, que es justo esa expectativa la que me causa sufrimiento. También me he dado cuenta, que uno no puede controlar tener o no tener la expectativa, simplemente aparece o no aparece. Y si aparece, aparece, osea, esta ahí y uno no pidió tenerla. Pero puedo ser consciente de que la tengo y observarla sin querer manipularla.

Puede llegar el momento en el que escriba aquí sin ninguna expectativa, que escriba solo por escribir, pero entonces, porque mejor no escribir en un papel, sin exponerme a que aparezca algún lector. No sé, no sé porque. Solo hoy me senté y me puse a escribir ésto. No podría describir que fuerza es la que me me lleva a actuar. Pero cada vez que investigo al respecto, me doy cuenta que pareciera ser que yo decido, y hago...pero más allá en realidad, no. No, no es así. Yo no decidí ir a la Universidad, estudiar esa carrera, que me gustara viajar, o que me atraigan las personas de mismo sexo, no escogí venir al mundo, ser mujer, vivir en CR, y así...a veces veo como nisiquiera las cosas más triviales y sencillas del diario vivir las estoy escogiendo. Incluso, los planes que hago, pueden cambiar totalmente, pueden sucederme eventos que jamás imaginé, puedo protagonizar historias super raras. En fin...cada vez me convenzo más de que todo sigue definitivamente un orden superior, que esta mucho más allá de mi humilde comprensión y de mis deseos personales.