No soporto los trabajos con horario fijo (de L a V de 8 a 5), me aterra la idea de levantarme todos los días a la misma hora y de tener que irse a la cama fijo tempranito entre semana. Las 40-45 horas que la gente normalmente trabaja a mí se me hacen eternas, no veo la hora en que llegue el Viernes. Y el Domingo hay depresión segura por la tarde…
Lo peor de todo es llegar a la casa por la noche y sentir que no hiciste nada en el día más que trabajar, que en ese supuesto ratito de ocio, que se pasa volando, tienes que hacerte cargo de algo más en casa, luego te acuestas a dormir y ….épale, ahí estás de nuevo: abriendo los ojos a las 6 am para meterte una vez más en el mismo cuento.
Mi ex, me decía después de un año juntos que yo tengo graves problemas con el tema de la libertad. En el trabajo, en las relaciones y en toda actividad humana….Puede ser que tenga un poco de razón, aunque yo pienso que es más una cuestión de rebeldía con el sistema. Todo lo que esté muy sistematizado, sin campo para la espontaneidad me da harta pereza.
Me asfixio si no hay algo nuevo, diferente, loco, que sale de la nada. Y aunque todavía no tenga muy claro como utilizarlo, soy fiel partidaria del libre albedrío del ser humano, si al final, es eso lo que realmente nos hace humanos no?
Además debo confesar que por mi tipo de personalidad soy altamente pasiva y necesitada de tiempo libre, de tiempo para mí, para estar sola o simplemente para hacer lo que se me dé la gana. Y sin ese espacio, algo por dentro se me seca, y me pongo amarga como el mate.
A raíz de toda ésta situación, decidí convertirme en una profesional independiente, con todos los riesgos e inestabilidad que eso conlleva, y aunque a veces las cuentas se ponen más rojas de lo imaginado, y tenga que hacer milagros para salir de tantos gastos y deudas y no tenga ni medio plan de pensiones ni el tal seguro médico, sigo en marcha, con la esperanza de que las cosas mejorarán.
No es que no quiera trabajar, o estar por completo en una relación con alguien, es que sencillamente me he dado a la tarea de descubrir lo que NO quiero, y sigo en el camino de tratar de vislumbrar lo que sí, es como un equilibrio que me encantaría algún día alcanzar….